Andalucía es tierra de sol y playa, un destino turístico ideal para quien busque descanso y temperaturas agradables. Durante muchos años, así se promocionó nuestra comunidad autónoma hacia el exterior. Hoy, además de ser destino de miles de visitantes que buscan disfrutar de nuestras costas y emblemáticas ciudades, ofrece una amplia gama de posibilidades relacionadas con el turismo activo y de ocio. En esta entrada queremos hablar de los ríos de Andalucía en los que se puede disfrutar del rafting, una actividad que en nuestra comunidad cuenta con adeptos desde hace unos 15 años. Hasta ese entonces, el imaginario popular vinculaba la práctica de los deportes de aguas bravas a otros lugares de nuestro país: Aragón, Cataluña, Galicia, etcétera. La expansión del turismo activo, en contacto con la naturaleza, sitúa hoy al rafting en el primer plano de la oferta de ocio de Andalucía.

Sierra Nevada juega un papel fundamental para que podamos disfrutar de esos ríos. Declarada Parque Nacional en el año 1989 (anteriormente había sido considerada Reserva de la Biosfera), forma parte de la Cordillera Penibética, que se prolonga de Este a Oeste por las provincias de Almería, Granada, Málaga y Cádiz. Sierra Nevada está ubicada entre Almería y Granada y cuenta con los picos más altos de la península ibérica: el Mulhacén (de más de 3.478 metros de altitud) y el Veleta (de alrededor de 3.400).
El deshielo en sus cumbres contribuye a que los ríos reúnan las condiciones apropiadas para practicar el rafting y para que los apasionados del kayak nos deleitemos con las aguas bravas. Normalmente, para disfrutar de un buen descenso tenemos que contar con cauces que tengan un volumen de agua apto y un mínimo de desnivel. ¿Dónde hacer rafting en Andalucía? Son tres los ríos que reúnen las condiciones necesarias; los hemos clasificado por nivel de dificultad:



Río Guadalfeo: el Guadalfeo nace en el Mulhacén, en plena Sierra Nevada. Tiene entre sus afluentes a los ríos Poqueira, Trevelez y Cadiar. También es conocido como Órgiva, Valdecillos, Río Grande y río de Motril. Desemboca en el Mar Mediterráneo y su curso se prolonga durante 73 kilómetros. Es cerca de la localidad de Órgiva donde se practican los descensos, que SaltaRíos comercializa en dos tramos: uno familiar (que discurre entre el Cortijo del Granaíllo y el puente de Órgiva) y otro más técnico (entre el puente de Órgiva y el embalse de Rules).
En ambos casos, el rafting en el río Guadalfeo se practica en un entorno de un elevado valor paisajístico, con preciosas vistas de la sierra. Y es que este incomparable recurso natural está enclavado en plena Alpujarra granadina. En el primer tramo de rafting se invierte aproximadamente una hora y es perfecto para grupos de amigos, escolares, despedidas de soltero y soltera, familias, etc. Se trata de un río de grado II (clasificación que, según estándares internacionales, determina la dificultad del descenso. El grado II es de iniciación). Las lluvias establecen cuándo comienza la temporada, que normalmente arranca en invierno y se alarga durante toda la primavera.



El nivel de dificultad se incrementa en el segundo tramo, en el que el río se encañona. Entre el puente de Órgiva y el embalse de Rules se practica el rafting más fuerte de Andalucía (su grado es III-IV). Los rápidos se suceden y la emoción está garantizada, pero los participantes han de presentar una serie de aptitudes para poder realizar este descenso, que requiere concentración, habilidad y atención constante a las instrucciones del guía o monitor.
El punto de partida del rafting en el Guadalfeo está muy próximo a lugares de interés turístico. Muchos de nuestros clientes aprovechan y, al finalizar el descenso, se acercan a la playa (está a 10 ó 15 minutos en coche) o practican trekkin (senderismo) por las preciosas rutas de media montaña que se encuentran próximas a Órgiva.
Río Genil: el Genil también es un referente del los descensos y está ubicado en el centro geográfico de Andalucía. De hecho, es el rafting más comercial de nuestra comunidad autónoma. Cada año, miles de personas disfrutan de sus rápidos y olas en una experiencia que no podemos dejar de recomendaros. Es un afluente del Guadalquivir y, al igual que el Guadalfeo, tiene su nacimiento en Sierra Nevada. Su cauce se nutre del deshielo y también de la presa de Iznájar (que es la más grande de Andalucía) y tiene una longitud de más de 350 kilómetros (es el segundo río más largo de la comunidad después del Guadalquivir, en el que desemboca en el ayuntamiento de Palma del Río, en la provincia de Córdoba).



Este río discurre por Granada, Córdoba, Málaga y ofrece tramos de interés para hacer rafting en varias provincias. Los más demandados están situados en Córdoba, aunque geográficamente están más próximos a Málaga que a la capital cordobesa. También está muy cerca de Antequera (30 kilómetros), de Granada y Sevilla. Otro de sus alicientes es la proximidad con la Costa del Sol, una de las zonas más turísticas de Andalucía: Estepona, Marbella, Fuengirola y Torremolinos están muy cerca de la zona en la que se practica la actividad.
El tramo con más éxito del río Genil para la práctica del rafting es el que discurre entre Benamejí y Palenciana (en Córdoba, como os contábamos). Es apto para personas de todas las edades, puesto que es un grado II – III. Normalmente, los descensos en rafting en el Genil empiezan en mayo y se prolongan hasta octubre. La actividad dura cuatro horas (el descenso se prolonga durante dos).
En el Genil hay también la posibilidad de optar por un rafting más tranquilo, ideal si en el descenso van a participar niños de corta edad (sólo tienen que saber nadar). Discurre en Benamejí (esta localidad es el punto de partida y de remate), concretamente entre la fuente de la Ecilla y la aceña árabe. Como en otros tramos, durante la actividad los monitores de las embarcaciones se encargan de proponer juegos a los asistentes para que disfruten al máximo de la experiencia.



Río Guadalquivir: el Guadalquivir nace en la Sierra de Cazorla, en la provincia de Jaén. Es uno de los ríos más largos de España (el quinto) y, además de Jaén, discurre por las provincias de Córdoba, Sevilla y Cádiz (su desembocadura está en Sanlúcar de Barrameda). Es un río con una gran cantidad de afluentes (disfrutamos con nuestros kayaks de algunos de ellos, como el río Guadiato), entre los que se encuentran el río Genil (el más grande de todos), el río Guadalimar o el río Guadaíra. Su curso se prolonga durante más de 600 kilómetros y discurre por zonas de elevado valor paisajístico. Su fauna y flora son objeto de estudio constante por parte de investigadores.
Es en la provincia de su nacimiento (Jaén), donde se puede practicar rafting. De hecho, en ese tramo el río recibe el nombre de Alto Guadalquivir. Junio y agosto son las fechas idóneas para disfrutar de este descenso, que es perfecto para iniciarse en este deporte y para disfrutar con los más pequeños. En general, en SaltaRíos recomendamos los ríos Guadalfeo y Genil a las personas que busquen sensaciones más intensas (más rápidos, olas, etc.), mientras que este tramo destaca por la belleza paisajística de su entorno. El Alto Guadalquivir es un Paraje Natural (declaración que implica protección del espacio para su conservación). Los descensos en esta zona contribuyen a que los más pequeños disfruten del entorno y le concedan al entorno natural el valor que merece, por lo que resulta ideal para colegios o actividades extraescolares cuyos responsables quieran potenciar la conciencia medioambiental de los jóvenes.
¿Os animáis a probar alguno de estos ríos? Os recordamos que en nuestra web de actividades podéis encontrar los precios de su comercialización y, para más aclaraciones, estamos a vuestra disposición por teléfono o a través del formulario de contacto de SaltaRíos, que ofrece descuentos para grupos y para escolares.